Ingredientes:

   - 1,5 kg o 2 kg de costillas de cerdo ibérico en una pieza

   - 30 ml AOVE

   - 125 ml vino blanco, jerez

   - Especias: pimienta, tomillo, orégano, romero; al gusto

  - Sal marina, al gusto

   Preparación:

   1.- El día anterior se pone el costillar en maceración con las especias y la sal. Primero se pone la sal sobre el costillar y después se añade por este orden: la pimienta, el tomillo, el romero y el orégano, se extiende todo bien y se masajea para que quede adherido; esto primero por una cara y luego por la otra. Se enrolla el costillar ya salado y espaciado sobre si mismo y después se lía en papel film y se lleva al frigorífico durante 24 horas.

   2.- Se precalienta el horno a 180 º C, calor arriba y abajo. Mientras se calienta el horno se prepara una bandeja con papel de aluminio y encima papel de horno, después se coloca el costillar. Ahora se rocía con el aceite y el vino blanco, se tapa con papel de aluminio y se cierra todo lo mejor posible.

   3.- Una vez caliente el horno se introduce la bandeja, a media altura y se deja hornear por una hora.

   4.- Pasado el tiempo de horneado se saca la bandeja del horno y se le quita el papel de aluminio que tiene el costillar por encima.

   5.- Se pone nuevamente la bandeja en el horno a 250 º C con la opción de gratinado, durante 10 minutos aproximadamente; hay que estar pendiente pues a lo mejor necesita menos tiempo y se podría tostar demasiado.

   6.- De nuevo se saca la bandeja del horno y se le da la vuelta al costillar. Se pone en el horno y como en el paso anterior se pone a gratinar. Ojo con el horno !!! . Cada horno es un mundo y no queda más remedio que estar pendiente durante este proceso.

   7.- Ya tenemos el costillar hecho, lo dejamos reposar fuera del horno unos 10 minutos antes de servirlo.

                                  Ahora toca comérselo